jueves, 23 de abril de 2015

Jugar es la primera forma de aprender.

Así que me tomé diez (sí, quince, a lo sumo) minutitos para echar sin más la tapa que me gustaría que tuviera uno de mis libros más queridos. A saber qué aprendí de esto. Uno se entera recién cuando crece.

No hay comentarios:

Publicar un comentario